MENTA
Es de un sabor muy agradable y uso está extendido en infinidad de preparados.
Tomándola en tés tiene la propiedad de facilitar las digestiones dificiles.
Su uso se presenta tanto en golosinas como aderezo en ensaladas, pues su efecto vivificante otorga una sensación de bienestar general.
Por su gran poder curativo esta planta es usada en:
Problemas digestivos, dolores estomacales, diarreas, ansiedad, nerviosismos, malestares generales, languidez, indigestión, dolores de cabeza, mal aliento, fortalece las glándulas y es muy apropiada para las personas con problemas cardíacos. Para las personas que pasan por periodos de depresión o angustia, esta planta es apropiada. Quita las ventosidades intestinales, muy efectiva contra calambres y malestares cefalicos. Contra los mareos o vómitos también actúa favorablemente, como así en problemas del hígado y los riñones.
Puede utilizarse tanto en té como para sazonar comidas como sopas, ensaladas y otros preparados culinarios. Su inclusión en las comidas beneficiará en grande a quien la consuma.
Polvo de Menta
Para hacer un polvo de menta se dejan secar las hojas a la sombra en un lugar seco y ventilado, luego cuando ya esta quebradiza, se pulveriza utilizando los medios conocidos, como un molinillo de café o a mano con un mortero de madera. Luego se ensobra y se guarda.
Como se prepara en infusión
Para preprar el té, se emplea 30 gramos de esta hierba e un litro de agua. Se hacer hervir l agua y luego se echa sobre la hierba, dejandose unos minutos reposar, puede endulzarse con azúcar o miel. Para problemas digestivos, se toma después de las comidas un pocillo bien caliente. Lugo puede seguirse cada cuatro horas, un pocillo.
Utilizando el jugo fresco de menta
Se junta un uñado de hojas de menta y se agrega un poco de agua con muy poco azúcar, se licúa en una procesadora de vegetales o licuadora, se filtra a través de un colador fino y se guarda en refrigerador. Luego uede tomarse cada hora una cucharada del jugo durante el día